Sensaciones muy encontradas, porque por una parte, te sientes muy feliz de dar vida a tu hijo, pero por otro lado también te sientes desbordada por las naúseas, el cansancio, las múltiples consultas a los médicos, los cambios en tu cuerpo, el miedo al parto… Demasiados aspectos que se banalizan y que no se explican cuando se habla de maternidad. ¿Alguien te explicó bien las noches sin dormir? ¿O lo que era un parto sin epidural? ¿O los conflictos que se generarían cuando todo el mundo viene a darte consejos de cómo deberías educar a tu hijo, o peor aún, te critican porque tu hijo tiene « mamitis » o lo estás malcriando? ¿Los días sin comer o en el mejor de los casos comiendo de pie?

Utlizaré diferentes técnicas como las flores de Bach, la hipnosis, las metáforas, el coaching, la PNL dependiendo de cada mujer para que te sientas acompañada, escuchada, apoyada y respetada en cada momento. Pero sin duda, las técnicas en las que haré especial hincapié en este momento, serán el metamórfico, y los ajustes emocionales con el péndulo hebreo, puesto que nos permitirán recentrarte en la persona que tú eres y retirar el exceso emocional generado por el aumento hormonal. 

Lo que busco con esta técnica es retirar ese exceso hormonal, aliviar el estrés de la futura mamá y por consiguiente, liberar al bebé de emociones tóxicas no necesarias, ya que recientemente numerosos estudios nos han mostrado el impacto del estado emocional de la mamá durante el embarazo en el neonato.